La historia se remonta a los años 60-70 epoca en la que mis abuelos emigraron a Francia, y su hija (mi madre) se quedo en el pueblo con sus abuelos (mis bisabuelos).
Mis abuelos ganaban suficiente dinero para mandar a mi bisabuela y que a mi madre no la faltara de nada, pero en aquella época y en un pueblo, los regalos de Reyes Magos de mi madre consistían en unos calcetines y unas mandarinas (y da gracias), pues mi bisabuela no se iba a la ciudad a comprar juguetes.
Llego una Navidad que en lugar de venir mis abuelos a España fue mi madre a Francia. Y allí se celebra Papá Noel, costumbre tomada de los americanos.
Allí recibió sus primeros regalos de Papa Noel. Mis abuelos compraron muchísimos regalos, muchos juguetes, intentando en parte compensar a mi madre por su ausencia el resto del año. ¿Qué puede pensar una niña pequeña, que de los Reyes recibe una mandarina, y de Papa Noel muchos juguetes?
¡Qué bueno es Papá Noel!
Y desde entonces y hasta el día de hoy se ha conservado esa tradición en mi familia. Además a mi me encantaba porque así disfrutas los juguetes todas las vacaciones del cole.
Cada familia crea sus propias tradiciones y si a vosotros os gusta...perfecto!!
ResponderEliminarMi madre también me cuenta siempre que a ellos los Reyes les traían naranjas y alguna nuez y eran muy felices con eso.
Claro, hombre el año que viene que Alma ya se enterará más, ya guardaremos algún regalito para Reyes.
ResponderEliminarAhora los regalos son hasta en exceso. No llegan ni a jugar con todo creo yo.
Gracias por pasarte, ya te agregué a mi lista de blogs!
Un abrazo